El riesgo.En pocas horas, Argentina juega contra Angola, un equipo rudo, tosco, rápido y sin experiencia mundialista.
Durante estas semanas, se escuchó reiteradas veces decir que era irresponsable no haber organizado más partidos amistosos previos al Mundial porque en comparación con las demás selecciones, la nuestra sólo ensayará oficialmente una vez. ¿Cómo podía ser que los demás encontraran equipos contra los cuales jugar y nosotros nos comprometemos a un sólo desafío?
Per, hay dos posturas frente al mismo problema: ¿Es preferible probar a la Selección Nacional en varios partidos a pocos días de empezar a jugar? o ¿Es mejor practicar a puertas cerradas, a lo sumo con algún encuentro con algún equipo juvenil, para mejorar deficiencias y para no desgastar por demás a los jugadores?
Por cómo se han presentado ciertos eventos de lesiones y problemas físicos o por cómo se desarrollaron los campeonatos en Argentina y en Europa, lo que mejor le calza a este equipo es una preparación seria y exigente pero también relajada, que evite sobresaltos. Todavía se espera la recuperación de varios jugadoes (principalmente Heinze y Messi) y ponerlos a jugar varios partidos más es un riesgo que en esta instancia puede ser irreversible. Holanda, por ejemplo, hoy tiene un lesionado más, Rafael Van der Vaart, quien en el partido contra Camerún sufrió un nuevo esguince de tobillo.
Los campeonatos europeos terminaron una semana antes de que se debiera entregar las listas oficiales el 15 de mayo. Recién siete días después, los 23 representantes nacionales pudieron estar juntos para empezar a concentrar. Ante la negativa de los clubes a ceder los jugadores con anticipación (otra muestra del achicamiento del poder de los estados nacionales frente a los intereses privados -menos cruel, pero evidente) se debe seguir un plan intensivo que combine la exigencia y el descanso. Es lo que nos permite el tiempo, sólo 25 días de preparación conjunta.
Jugar contra Angola es arriesgado. Si se salvan todas las piernas, habrá que ver después de los primeros tres partidos de la Copa del Mundo si faltaron más ensayos o se trató de un plan perfecto o que, por lo menos, salió perfecto.